domingo, 14 de abril de 2013

Cavilación Profana



El hombre por buscar destino abandonó el paraíso, de ninguna manera pecado pero tampoco inocencia.  El dejar de beber es un intento por recuperar ese destino entendiendo como destino ser responsable de uno mismo.
Los A.A. no salimos de ningún paraíso pero nos asistía el derecho de volver a vivir, de la manera que lo dispusiéramos. En resumen buscamos ser libres como aquellos que desobedecieron en el paraíso.
CAVILACION PROFANA
            Dios viene desde los comienzos del  tiempo. De un  paraíso, que abandonamos para poder llegar a “Ser”,  con el propósito de no seguir ocultos en la nada eternal de los traspatios del que todo lo ES. O de otro modo ante Él que solo se sabía “que lo era absolutamente todo, poseedor intemporal de la vida y de los actos libres que pivotaban desde el árbol del conocimiento del bien y el mal”.      Ahora, sólo, no se explica ese afán ese apetito de análisis, esa ambición de beatitud quizá porque al escoger la muerte en su desobediencia anhela la inmortalidad.

En nuestra particularidad de A.A. no nos basta la vida recuperada, vivimos siempre sofocados no por la enfermedad sino porque no vemos claro la inmortalidad que precisamos para salvar el alma que se quedó en el paraíso por su inocencia.

            Queremos –eso parece- quedar tan limpios que rechazamos la experiencia mundana y no nos percatamos que el alcohol no nos permitió precisamente gozar el mundo.  Volver al mundo con nuestro juicio es la alegría de vivir prometida.

            No es que no nos toque de otra, es lo que anhelamos en nuestro delirio alcohólico, estar entre los hombres con el significado social logrado, gracias al poder de la unidad sentida, fortalecida además. Lo que cuenta al fin y al cabo es salvar el mundo que nos cobijó y nos dió lugar sin coaccionarnos, como lo fue el paraíso donde teníamos prohibido el saber que nos humaniza.  
                                                                                              Ricky Morales
San Salvador, 1 de Febrero de 2012.

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